Tobotronc en Andorra: una experiencia inolvidable
¿El tobogán natural más grande del mundo? Has leído bien. No solo existe, sino que está en el corazón de Andorra, y mide nada más y nada menos que 5,3 kilómetros. Una ocasión para vivir una experiencia llena de adrenalina y diversión y que, como comprobarás a continuación, si sigues leyendo, no deberías perderte bajo ningún concepto.
Es uno de los muchos atractivos que te ofrece la Andorra más dinámica, para toda la familia y sin necesidad de destrezas previas, tanto en invierno como en verano. Pero conozcamos más en detalle todo lo que te ofrece Tobotronc.
¿Qué es el Tobotronc?
Como hemos apuntado, el Tobotronc de Naturland es una especie de trineo sujeto a unos raíles que recuerda a una montaña rusa. Desciende por esa estructura a lo largo de más de cinco kilómetros y cada usuario puede bajar al ritmo que quiera, según active más o menos los frenos.
Habrá quien opte por una velocidad que genere más adrenalina y otros que prefieran hacer un descenso más relajante; es la diferencia entre los amantes del esquí alpino y el esquí de montaña. Cada cual, a su ritmo ; )
En cualquier caso, se trata de una actividad inserta dentro del parque Naturland y, según muchos de los que la han probado, la que más merece la pena dentro de la oferta lúdica de este complejo de ocio y atracciones rurales.
¿Dónde se encuentra?
Así, para poder disfrutar de esta diversión que te conecta con la naturaleza y la montaña en estado puro, hay que acceder a Naturland y adquirir el para acceder a sus instalaciones. ¿Cuánto cuesta subir al Tobotronc? Depende del momento de la temporada, pero el precio del Tobotronc puede variar entre 25 euros y 45, también en función de si el usuario es adulto, menor o si se beneficia de algún tipo de descuento.
Este fantástico tobogán o trineo sobre raíles, considerado el más largo del mundo como tal, se encuentra en la parroquia de Sant Julià de Loria, en la zona más al sur del Principado de Andorra, dentro, como decimos, del parque Naturland.
Se trata de una actividad que no se puede realizar de manera aislada; es decir, para poder subirse al Tobotronc es preciso adquirir la entrada para Naturland y, una vez allí, ya podemos subir (o bajar) de este fantástico trineo sobre hierro.
El trayecto de Tobotronc tiene una duración aproximada de 20 minutos. Se trata, por tanto, de una experiencia que da de sí, y que se puede realizar tanto en bajada como en subida. ¿Requisitos para acceder a Tobotronc? Medir más de 1,20 cm. Los que superan esa altura deberán ir acompañados si son menores de 13 años, con un adulto en el mismo trineo. A partir de 14 años, pueden viajar sin compañía.
Por qué probar el Tobotronc Naturland
Situado en una cota de 1600 metros de altitud, Tobotronc Naturland te conecta con la naturaleza desde el minuto uno. Además de la sensación de velocidad, libertad y adrenalina que te aportará ese descenso
Quienes lo han probado destacan la inmersión en la pura naturaleza de los Pirineos en la que te sumerge el descenso en Tobotronc. Depende de la estación del año en que se realice la actividad, ofrecerá distintos matices, tanto de la flora, con las distintas tonalidades de las hojas de los árboles, presencia o no de nieve, como de la fauna, con la posibilidad de avistar alguna que otra ave en el cielo.
Hay que tener en cuenta que para montarse en el Tobotronc hay que reservar plaza con antelación y que no es una actividad que se pueda llevar a cabo todos los días del año. Lo mejor es consultar las fechas disponibles en su calendario, que son los que el parque Naturland permanece abierto.
Para ello, hay que adquirir la entrada Aventura, que da derecho a un día entero de actividad de montaña, entre las que destacan las siguientes:
- Airtrekk y tirolina. Considerado el mayor Sky Trial de Europa gracias a su estructura de 10 torres a 13,5 metros de altura. Tres niveles de dificultad para que disfruten de la experiencia hasta 200 personas por hora.
- Buggy a pedales. Ideal para que los niños experimenten recorridos todoterreno con estos vehículos de ruedas gruesas que no conocen obstáculos.
- Circuito ardilla. No se trata de avistar a esos simpáticos roedores sino de sentirse como esos animalitos. ¿Cómo? Adentrándote en un recorrido en pleno bosque, sobre unas mallas gigantes, elevadas sobre el suelo y sujetas a los árboles, que te permitirán moverte por la naturaleza como nunca antes habías experimentado. Apto para niños y adultos.
- Laberinto de madera. Una atracción para niños con todo el encanto de los míticos laberintos de setos, solo que en este caso son inquietantes paredes de madera.
Además, tiro con arco, Xtrem jump, camas elásticas, paseos en poni, tubbing y muchas más diversiones con nombres exóticos para no aburrirte nunca en Naturland.
Alternativas al Tobotronc: Magic Gliss
Si bien subirse el Tobotronc de Andorra es un planazo, puede suceder que el día elegido no haya disponibilidad por exceso de afluencia, o que esté cerrado o incluso en labores de mantenimiento. De ahí que sea buena idea contar con un plan B, y ahí entra con fuerza el Magic Gliss de Canillo.
Se trata de otro tobogán, diseñado en este caso para alcanzar grandes velocidades y vivir una experiencia vertiginosa. Se encuentra dentro del Mon(t) Màgic Family Park, y consta de 555 metros de bajada y 180 de subida para alcanzar velocidades de hasta 40 km/h. Además de la adrenalina que este descenso impresionante te aporta, también es una oportunidad ideal para disfrutar de unas vistas hermosas de la naturaleza circundante en la parroquia de Canillo.
Puedes acceder a ella a través de pistas o por el telecabina de Canillo y está incluido en el forfait de peatón. ¡Tienes que probarlo!
Vive Andorra.